Allá por junio, durante el útlimo fin de semana de la Feria del Libro de Madrid, algunos blogueros tuvimos la oportunidad de tener un encuentro con Rachel Caine, autora de la saga Los vampiros de Morganville (podéis leer mis reseñas de sus seis primeros libros aquí, aquí, aquí, aquí, aquí y aquí), en una terraza del Retiro en el que pudimos preguntarle todo lo que siempre quisimos; y ella lo respondió todo muy amablemente.
Sin embargo, Xulieta y yo nos habíamos quedado con ganas de más, por lo que hablamos con Irene, la representante de la editorial Versátil, sobre la posibilidad de hacerle una entrevista personal a la autora más tarde. La respuesta fue afirmativa y tuvimos un montón de tiempo para enterarnos de muchísimas cosas interesantes que la autora tuvo a bien contarnos. Es encantadora, una persona muy sencilla y cercana. Fue un placer tener la oportunidad de conocerla un poquito más de cerca. Da gusto encontrarse con autores tan abiertos y dispuestos.
La entrevista ha sido transcrita y traducida directamente de la grabación obtenida durante la entrevista. He intentado ser lo más fiel posible a sus palabras para que no os perdáis detalle.
También tuvimos la oportunidad de charlar personalmente con su marido, el ilustrador R. Cat Conrad, más conocido como The Cat. Sin embargo, aunque a nosotras nos pareció interesante, hemos decidido no traducirla y publicarla, debido al carácter informal de la conversación.
Sin embargo, Xulieta y yo nos habíamos quedado con ganas de más, por lo que hablamos con Irene, la representante de la editorial Versátil, sobre la posibilidad de hacerle una entrevista personal a la autora más tarde. La respuesta fue afirmativa y tuvimos un montón de tiempo para enterarnos de muchísimas cosas interesantes que la autora tuvo a bien contarnos. Es encantadora, una persona muy sencilla y cercana. Fue un placer tener la oportunidad de conocerla un poquito más de cerca. Da gusto encontrarse con autores tan abiertos y dispuestos.
La entrevista ha sido transcrita y traducida directamente de la grabación obtenida durante la entrevista. He intentado ser lo más fiel posible a sus palabras para que no os perdáis detalle.
También tuvimos la oportunidad de charlar personalmente con su marido, el ilustrador R. Cat Conrad, más conocido como The Cat. Sin embargo, aunque a nosotras nos pareció interesante, hemos decidido no traducirla y publicarla, debido al carácter informal de la conversación.
Aviso de que las preguntas o respuestas pueden contener spoilers de alguno de los libros o de la saga al completo.
— The Cat: Tengo una pregunta.—Rachel Caine: ¿Cuál?—The Cat: ¿Cuál es la situación más embarazosa que has vivido como autora?—Rachel Caine: Hay demasiadas entre las que elegir. Vale. Mi favorita sigue siendo esta: estaba en una firma de libros en un centro comercial, y el libro que estaba firmando en ese momento tenía una calavera gigante en la portada del libro. Obviamente era una novela de terror. Pero quienquiera que lo cogiera y le echara un vistazo lo había colocado con la portada boca abajo. Así que se acercó una señora mayor, lo cogió y leyó la contraportada y comenzó a decirme: «Tiene muy buena pinta. Parece muy interesante. Me gusta cómo desarrollas el argumento». Le di las gracias, lo giró y gritó: «¡Ahhh!». Me lo tiró a la cara y salió corriendo.—Lily: ¿De verdad?—Rachel Caine: Sí.—Lily: ¿Sabía que eras la autora?—Rachel Caine: Sí, sabía que era la autora.— The Cat: Ese es un ejemplo marketing fallido.—Rachel Caine: Efectivamente, el marketing no funcionó. ¡Ah! Tengo demasiadas. Me resulta muy difícil elegir otra, ¿se te ocurre alguna?— The Cat: ¡Sí!—Rachel Caine: Oh… Está pensando en una en concreto… Dame una pista y la contaré.
Rachel Caine y R. Cat Conrad — The Cat: De acuerdo. Veamos… (le dice algo en bajo)—Rachel Caine: Ah, ya la sé. Dark Icon. Es una gran convención en Atlanta, unas 6000 personas. Fui a donar sangre, había una enorme campaña de donación de sangre. Dono sangre a menudo. Creo que como autora especializada en vampiros, es lo que debo hacer. Estaba en la silla, donando sangre, cuando Charlaine Harris, la autora de los libros de Sookie Stackhouse, se acercó. Conocemos a Charlaine desde hace años. Así que Charlaine se acercó, la cadena HBO le había dado un vestido para que se lo pusiera, un vestido victoriano pascoag. Los cámaras de la HBO estaban con ella haciendo un documental del Comic Con, ella se había acercado solamente para apoyar la donación de sangre y agradecerle a la gente haber venido. Me vio desde el otro lado de la estancia y lo supe, sabía que iba a hacer algo así. Se acercó y… Bueno, tengo que representarlo. Se acercó y me dijo: «Oh, oh querida, eres una autora famosa, no necesitas donar sangre para llamar la atención». En frente de los cámaras de la HBO.— The Cat: ¿Qué pasa con la convención Romantic Times?—Rachel Caine: No, no puedo contar esa anécdota. Fue demasiado. En cualquier caso, no fui yo, no fui yo.— The Cat: Es verdad. No fuiste tú, pero fue bastante vergonzoso.—Rachel Caine: Para alguien, pero no para mí. ¿Sabéis? No fui yo, así que no es mi historia.— The Cat:¿Qué pasa con el incidente del ascensor? El de la mujer…—Rachel Caine: Vale…— The Cat: Está intentado ver cómo lo cuenta…—Rachel Caine: Vale… No… Pero no puedo mencionar el nombre de la otra persona implicada. Fui a esta convención en Chicago, él no venía conmigo, estaba con otra escritora que conozco desde hace muchos años. No sé qué mosca le picó pero estábamos en el ascensor, subiendo a la habitación y... La Romantic Times Convention en Estados Unidos es muy extraña, reúne a 500 autores allí: juvenil adulto, romántica-suspense… todo tipo de autores…— The Cat: Y muchas veces los modelos de las portadas van a la convención a…—Rachel Caine: Es verdad, hay un montón de modelos de portada…—The Cat: Así que también hay un montón de hombres, hombres que tienen el pelo más largo que yo, que llevan trajes peculiares…—Rachel Caine: Y a veces también hay strippers. A veces. Volviendo a mi amiga… Al entrar en el ascensor había un hombre que llevaba un maletín y, claramente, no estaba aquí por la convención, me di cuenta, claramente. Pero mi amiga dijo: «¿Así que eres modelo de portada?». Y yo le dije… Yo estaba en plan: «¿Qué estás haciendo?». Él dijo: «No, ¿de qué estás hablando?» y ella le dijo: «Ya sabes, hay modelos de portada que están en esta convención, deberías considerarlo, eres muy atractivo y deberías ser modelo de portada». Y él estaba: «Oh, ¿eso crees?». Y yo me puse a darle al botón para ir más rápido. Y antes de que llegáramos a nuestra planta, él intentó darnos la llave de su habitación. Le dije: «¿Qué estás haciendo?». Así que sí, fue embarazoso. Pero, de nuevo, en realidad no por mí. Solo fui testigo.— The Cat: Pero estabas allí…—Rachel Caine: Sí, estaba allí. Adelante, más preguntas.
—Lily: ¿Piensas en alguien en concreto para representar a Michael…?—Rachel Caine: ¡Ah! ¿Que si están basados en alguien?—Lily: No, actores.—Rachel Caine: Oh, actores, actores… ¿Sabes? Me resulta muy difícil hacerlo porque cualquiera que eligiera en su momento, empecé la saga en 2006, cualquiera que eligiera en su momento ya ha seguido adelante con su carrera y ni siquiera tienen el mismo aspecto. Así que es difícil. Pensé que Kat Dennings haría bien de Eve. En un principio me gustó Alex Pettyfer, pero eso fue antes de enterarme de todas sus historias, las cuales no repetiré aquí. El problema de los actores que representan libros es que cuando el proyecto ve la luz, ya son demasiado mayores para interpretar a adolescentes… Ya… es decir, Alex Pettyfer tiene barba, ya. Me resulta difícil elegir entre los adolescentes, es más fácil de pensar en los adultos, porque no van a cambiar tanto, pero —siempre he dicho que quería a David Tennant como Myrnin. Alguien hizo un vídeo, se lo he enseñado a ella [Irene, su traductora (entre otras cosas)], en Youtube. Es muy, muy bueno. Me convenció por completo de David Tennant interpretando a Myrnin.—Lily: ¿Y Amelia?—Rachel Caine: En un mundo fantástico ideal, alguien a quien jamás me podría permitir, Gwyneth Paltrow. O alguien así. Pero no puedo permitírmelo, no puedo pagarle.—Lily: Solo es por imaginar… Por hacernos una idea del aspecto físico.—Rachel Caine: Me la imagino como a Grace Kelly, de los años 60, en mi mente es alguien que tiene esa perfección gélida. Es lo que pienso. Pero hay un montón de actrices que podrían hacerlo, alguien a quien sí podría permitirme.—Lily: ¿Y Shane? Sí, me interesa mucho el tema.—Rachel Caine: Pensé en alguien, pero se me acaba de olvidar el nombre… Actuó en… Participó en el remake de La última casa a la izquierda, era el niño de la película [creo que se refiere a Spencer Treat Clark]. Es muy bueno. Era perfecto en esa película, pensé: «Ese es Shane, justo así». Pero no he visto muchos actores que me hicieran pensar rotundamente: «¡Sí! ¡Ese!». No lo sé…
Spencer Treat Clark en la película —Lily: Es demasiado especial…—Rachel Caine: Eso es: es demasiado especial. Me gusta esa explicación. En un principio, pensé, imaginaos a qué momento me remonto, Jared Padalecki cuando era muy joven.—Lily: Sí, buena elección.—Rachel Caine: Sí, sí. Porque tenía el mismo pelo largo y enmarañado, y hombros anchos.
—Lily: ¿Cómo se te ocurrió un personaje como Myrnin? Tan… Tan… Digamos especial, de nuevo.—Rachel Caine: Myrnin era raro porque sabía… Tenía una lista de personas con las que iba a trabajar en los diferentes libros, y tenía una notita que decía: «Científico vampiro loco que vive en el callejón». Era la descripción completa que tenía de él: «Científico vampiro loco que vive en el callejón». Cuando empecé a escribir el libro, desde la primerísima escena que escribí en la que estaba él, me salió solo. No hice nada, lo tenía en la cabeza, incluso la ropa que llevaba en ese momento. Fue muy raro, lo único que puedo pensar es que he trabajado en él de forma inconsciente. Pero no sé de dónde ha salido, de verdad que no.—Lily: Sencillamente, ¿se volvió loco?—Rachel Caine: Sí, sí. Sabía que estaba loco, pero no imaginaba cómo de loco hasta que empecé a escribir las escenas de verdad. Una de mis amigas, en ese momento, era alguien bipolar, y según iba leyendo el libro me dijo: «¿Te das cuenta de que estás creando un personaje bipolar?». Y yo le dije: «No, no lo creo». Me contestó: «De verdad que sí». Y tenía razón. Así que lo vi más claro y seguí con ello.
—Lily: Normalmente, en la actualidad, los personajes buenos, los mejores personajes son los vampiros, son… Son… Sí, los tíos buenos. ¿Qué te empujó a hacerlos malos? ¿A hacerlos los malos de la película?—Rachel Caine: Pensé: «¿Realmente quiero escribir sobre vampiros?». Porque Crepúsculo acaba de salir, aunque todavía no era demasiado conocido y Richelle Mead estaba escribiendo el primer libro de Vampire Academy. Y pensé: «¡Vaya! Parece que los vampiros están de moda. Quizá deba escribir algo con vampiros. Pero no quería hacerlo a menos que ofreciera algo diferente. Miré a mi alrededor y me pregunté: «¿Qué está haciendo todo el mundo?». Todo el mundo estaba escribiendo sobre vampiros de forma romántica y, sí, es divertido pero quizá debería pensar en hacer algo diferente. Así que empecé a preguntarme a mí misma qué podía hacer para hacerlos diferentes. Y lo que saqué en claro es que quería que fueran muy poderosos, no necesariamente muy agradables, pero también vulnerables, porque desde el principio pensé que estaban enfermos y que trataban de ocultarlo. Esa fue la idea principal con la que empecé la saga de Morganville…—The Cat: Y los semáforos.—Rachel Caine: Y los semáforos. Pero lo que tenía muy claro es que no quería darles ese toque romántico porque quería que fueran aquello que mis personajes tuvieran que sortear.
—Lily: Esto es un poco personal, es una sensación que tengo de los libros. Quizá esté equivocada… Pero bueno, es una sensación. Es sobre Claire. Desde el primer libro o desde el segundo, tengo la sensación de que es especial en cierto sentido pero no revelas nada. Es decir, Amelia quiere algo de ella…—Rachel Caine: Sí…—Lily: Lo que muestras de ella… No lo sé. Tengo la sensación de que es especial pero no acabo de saber por qué.—Rachel Caine: Bueno, ¿por qué libro vas?—Lily: Por el seis.—Rachel Caine: Seis. Creo que no se ha dicho claro aún, pero Amelia quería que viniera a Morganville porque sabía que necesitaba a alguien que pudiera aprender de Myrnin. Sabía que Myrnin estaba enfermo y que probablemente muriera o dejara de serle útil. Y necesitaba a alguien que tuviera el talento, y había estado buscando a alguien, por eso hizo que Claire viniera. Ahora bien, en cuanto a si Claire está relacionada con alguno de los vampiros, no.—Lily: Ella tiene algo…—Rachel Caine: Sí.—Lily: ¿Y lo veremos en los próximos libros?—Rachel Caine: Sí, lo iréis viendo según vaya avanzando la trama. Veréis que realmente no tuvo elección desde el principio… Estoy intentando pensar qué parte aparece explícitamente en los libros y qué parte está en mi cabeza… Pero creo que está en los libros.—Lily: Sí, es una sensación que tengo, no sé si es solo cosa mía…—Rachel Caine: No, me lo han preguntado antes. Otra gente piensa… Mucha gente me ha preguntado si Claire tiene relación directa con Amelia.—Lily: No sé qué es, pero hay algo.—Rachel Caine: Sí, existe una conexión, sí. Y existe una razón por la que está allí. Pero todos tienen una razón para estar ahí. Ya sabes por qué está Shane allí, por su padre. Eve está allí porque no dejaría a Michael. Y Michael está ahí porque no se puede marchar. Así que… ¡es un buen jaleo!
—Lily: ¿Escribes los libros de principio a fin o por escenas?—Rachel Caine: Soy bastante lineal, me gusta empezar por el principio y escribir hasta el final, con escasas excepciones. Hubo un par que no me salieron así y tuve que ir saltando por el argumento porque no era capaz de sacar una escena y sabía que tenía un plazo de tiempo muy limitado para trabajar en él, así que cuando me atasco mucho con algo, avanzo a otra cosa y vuelvo más tarde a ello. Pero solo me ha pasado con dos libros en toda la saga. Pero normalmente suelo ser muy firme, comienzo por el principio y termino con el final.
Y esto es todo lo que yo puedo revelaros sobre este encuentro personal con Rachel... sin embargo, si os habéis quedado con ganas de más, ¡estáis de suerte! Por supuesto, no está íntegro el contenido de la entrevista y Xulieta os traerá la continuación un día de estos. Así que estad atentos a su blog si queréis seguir leyendo más sobre la autora.
¿Qué os ha parecido?