Reseña Rastro, Maggie Stiefvater

Título: Rastro
Título original: Linger
Autora: Maggie Stiefvater
Editorial: SM
ISBN: 9788467543643
Nº páginas: 429 pags
Precio: 15.95 €
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Trilogía Los lobos de Mercy Falls
1. Temblor
2. Rastro
3. Siempre

Sinopsis

Por más que lo desees

es imposible detener el tiempo:

pasa y lo cambia todo.

Y lo malo es que te arrastra consigo.

El invierno ha acabado.
Para algunos es una época de cambios.
 De transformaciones.

Pero solo para algunos:
Sam sigue siendo Sam.
Cole sigue siendo Cole.
Isabel no sabe lo que quiere,
pero sigue siendo quien es.
Solo Grace no está a gusto
en su propia piel.

Primavera: una estación
de historias que empiezan
y de otras que terminan.
De despedidas.
De abandonos.

Pero todo abandono deja un rastro.

Opinión personal

Los spoilers, si los hay, estarán debidamente indicados.

Rastro es la segunda parte de Temblor, y aunque no ha llegado al nivel de el primero (porque fue maravilloso) me ha gustado también muchísimo. La historia de amor de Sam y Grace me encantó desde el principio por su sencillez, naturalidad, amor sincero e incondicional. Pese a la adversidad. Son personas con caracteres muy diferentes con bastantes problemas que se unen para crecer juntos: sencillamente conmovedor. Y la primera parte se quedó interestantísima y me moría de ganas por leer la continuación. Por saber a cuántas cosas más tendrían que enfrentarse y tengo que decir que me ha encantado leer las dificultades en las que los somete la autora (sí, soy masoquista).

Sam ha vuelto en forma humana y aparentemente es para quedarse. Tengo que decir que la forma de describir la vuelta del chico y el reencuentro con Grace en Temblor me emocionó increíblemente. Es increíble cómo en unas pocas líneas la autora puede decir tanto y hacer sentir tantas cosas: me llenó de esperanza ante la nueva posibilidad que les daba la vida, me hizo deseas seguir leyendo para vivir ese bonito futuro juntos y me hizo temblar de emoción por la belleza de la escena. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. En Rastro ambos personajes tienen que enfrentarse por separado a sus propios demonios personales, a sus temores más ocultos y a sus deseos más prohibidos.

Es, sin duda, una novela de evolución, en donde ves cómo los diferentes personajes principales van evolucionando, van desarrollándose en función de sus experiencias, de su pasado y de sus capacidades personales.

Sam ha vuelto con el deseo de vivir un «felices para siempre» al lado de Grace pero la transformación permanente de algunos miembros de la manada le obliga a hacerse cargo de los nuevos mordidos y de los antiguos que siguen transformándose. Por eso, cuando Isabel se encuentra con un misterioso (y guapísimo) chico desnudo en su casa no duda en llevárselo a él. Isabel, por su parte, también está teniendo altibajos, la muerte de su hermano y la horrible situación que vive en su casa la están volviendo loca. Aunque tengo que decir que no es lo único por lo que la chica pierde la cabeza: me gusta especialmente la tensión que existe en la relación entre Cole e Isabel, se nota que hay algo entre ellos pero ambos se resisten a caer. Sus escenas son pequeñas gotitas de miel con limón que dejan un gusto agridulce en la boca.

Isabel decide que Sam es el único que puede ayudar a Cole, un ex rockero, ligón, aparentemente despreocupado, astuto, osado y provocador, cuyo único deseo es olvidar quien fue, salir de su mente, bloquear su corazón y perderse para siempre en la inconsciencia que supone la forma lobuna. Por todo ello, choca intensamente con Sam que no entiende cómo alguien puede desear dejar de ser una persona. Este enfrentamiento los lleva a ambos a plantearse «qué quieren en la vida», analizar sus posibilidades en el futuro y enfrentarse con un pasado trágico que les ha dejado secuelas a ambos en forma de profundos temores. Personalmente, me ha encantado conocer bastante más del pasado de ambos personajes, vivir con ellos experiencias dolorosas y entender, de esa manera, por qué son como son hoy en día. Tanto la historia de Cole, como la de Sam, me emocionaron profundamente.

Por su parte, algo en Grace está cambiando: siente que su verdadera naturaleza está gritando por revelarse. La situación de la chica me mantuvo en vilo todo el libro: le iban pasando cosas que más o menos iba relacionando e iba imaginando qué le podía pasar pero aún así no podía parar de leer para ver qué viviría a continuación. Me mataba la curiosidad de saber si mis elucubraciones resultarían verdad o todo sería una falsa alarma. Y según me iba acercando al final del libro, mi lectura se iba acelerando y fue imposible parar de leer hasta que terminé. El desenlace es bastante abierto y me dejó una profunda desazón en mi interior. Estoy deseando que salga el tercer libro de la saga para continuar con la historia ¡porque no puede quedar así!

Muy recomendado.

Valoración personal:

Citas

Esta es una historia de amor. Jamás imaginé que hubiera tantos tipos de amor, ni que el amor pudiera obligar a la gente a hacer tantas cosas diferentes. Jamás imaginé que hubiera tantas formas de decir adiós.

Esta es la historia de un chico que dejó de ser lobo y de una chica que empezó a serlo. Hace unos meses, la criatura mítica era Sam. Era él quien padecía una enfermedad incurable; era él quien se despedía. Su cuerpo era un misterio tan extraño, prodigioso y terrorífico que escapaba a nuestra comprensión.