Reseña Hush, hush, Becca Fitzpatrick

Título: Hush, Hush
Título original: Hush, Hush
Autor: Becca Fitzpatrick
Editorial: Ediciones B
ISBN: 9788466644174
Nº páginas: 366 pags
Precio: 15.00 €
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Tetralogía Hush, Hush
1. Hush, Hush
2. Crescendo
3. Silencio
4. Finale

Sinopsis

Nora Grey, una alumna aplicada en busca de una beca para la universidad, vive con su madre viuda en una granja a las afueras de Pórtland, Maine. Cuando Patch se convierte en su nuevo compañero de instituto, Nora siente a la vez atracción y repulsión hacia este extraño personaje que parece tener acceso a sus pensamientos. Luego se entera de que Patch es un ángel caído que quiere convertirse en humano. Nora está bajo su control, pero hay también otras fuerzas en juego y de repente se encuentra viviendo hechos inexplicables y en medio de una situación muy peligrosa.

Opinión personal

Los spoilers, si los hay, estarán debidamente indicados.

¿Sabéis de esos libros de los que se han leído tantas críticas positivos y una ha puesto muchísimas esperanzas en ellos y tiene las expectativas por las nubes? ¿Os es familiar esa sensación de nervios en el estómago cada vez que una se acerca al libro para empezar por miedo a que nos defraude? Bien, yo sentía todas estas cosas con Hush, hush y puedo decir muy emocionada que solo lamento ¡no haberla empezado antes!

Nora es una chica inteligente, reservada, quizá un poco solitaria, responsable, guapa y estudiosa. Sueña con ir a una buena universidad y se esfuerza mucho para que así sea. Vive con su madre en una preciosa casa apartada de la civilización y va al psicólogo desde que hace un año mataran a su padre en un tiroteo. Vive una vida tranquila y normal hasta que aparece Patch para despertar de nuevo sus más profundos miedos y hacer de su vida una montaña rusa. El chico acaba de ser transferido al instituto y jamás se relaciona con nadie. Hasta el momento en que el profesor de Biología tiene la feliz idea de cambiar a toda la clase de sitio y empareja a ambos protagonistas para trabajar en equipo en sus clases.

—Llámame Patch. Lo digo en serio. Llámame.

A partir de entonces, la vida de Nora se pone patas arriba y el peligro comienza a acecharla. Nora comienza a sufrir todo tipo de sucesos siniestros que la llevan a vivir atemorizada. Sabe que algo extraño está sucediendo y no cree que sea casualidad que el chico entrara en su vida al mismo tiempo. Lo que más me gusta de Patch es que no es el típico tío con apariencia de malo, él lo es de verdad.

—Te estoy diciendo que te veo venir y quiero que lo sepas. No has engañado a todo el mundo. Voy a averiguar qué tramas y te dejaré al desnudo.

—Es lo que más deseo.

Las formas y el comportamiento de Patch la confunden y sobre todo la aterrorizan, pero a la vez le atraen poderosamente. Es oscuro y seductor, a veces frío y a veces ardiente, siempre irónico y descarado, irresistiblemente atractivo y peligroso. Me recuerda un poco a Jace en su estilo pero con un lado oscuro que marca profundamente su carácter, define quién es.  Pero sobre todo me intriga su forma de actuar y sus comentarios velados: ¿quién es? ¿de dónde viene? ¿qué quiere de Nora? Sabe que tiene que alejarse de él, pero se siente incapaz de hacerlo porque algo muy dentro de ella lo desea con todas sus fuerzas.

—Me llevarás directo a casa— dije. Sonó más como una pregunta que como una orden.
—Si eso quieres....

Así comienza un delicioso y torturador tira y afloja, dialético y físico, entre los protagonistas que hace que el lector no pueda despegarse de la historia. La tensión de algunas escenas podría cortarse con un cuchillo y en otras tendrás que reprimir una sonrisilla tonta por los directos  e insinuantes comentarios de Patch.

—Nora: ¿Cuánto quieres apostar?

—Patch: Tu chaqueta

—Nora: ¿Quieres mi chaqueta?

—Patch: Quiero que te la quites.

Es genial cómo la autora sabe mantener el interés y la intriga por la pareja hasta el final. Es muy de agradecer que haya un desarrollo de la "relación" y que el amor no surja de la nada, sino de diversos encuentros y experiencias compartidas. Otro punto muy a favor es que el ritmo y el estilo de los diálogos es constante, en absoluto cae en la cursilería ni terminan por resultar empalagosos. Justo al contrario, diría yo, sabe dosificar muy bien los momentos y las conversaciones, haciendo de la relación entre ambos un caramelito a veces amargo y a veces picante. Becca crea algunas escenas memorables que dan ganas de releer una y otra vez.

Es cierto que la autora cae en algunos tópicos, es cierto que es fácil tener un sentimiento de déjà vu en algunas escenas o en determinados detalles, o quizá podamos comparar ciertos personajes con otros de otras novelas del género. Sin embargo, no me pareció algo excesivo ni la novela es un entero cliché por ello, vamos que esos pequeños parecidos no me impidieron disfrutar la novela al máximo.

Y lo mejor de la novela es que te mantiene enganchado hasta el final, sin saber muy bien por dónde van los tiros. Aunque el desenlace (cuando ya más o menos todo se va perfilando) no me supuso una completa sorpresa. No quiero especificar qué me esperaba y qué no porque no quiero spoilear a nadie, pero hay cosas que sí me sorprendieron y otras que no. En mi opinión, la autora ha cerrado un muy buen final. Además, quiero señalar para los temerosos de las sagas, que es cierto que es la primera parte de lo que en principio va a ser una tetralogía pero tiene un final totalmente cerrado por lo que se puede leer Hush, hush y dejarlo ahí.

Por mi parte, Hush, hush está absolutamente recomendado. Ya tengo la segunda parte así que voy a empezarla ¡ya mismo!

Valoración personal:

Citas:

—¿Quieres oír un secreto? —dijo en tono confidencial.—Nunca he ido al colegio. ¿Otro secreto? No es tan aburrido como esperaba.
Estaba mintiendo. Todo el mundo iba al colegio. Había leyes. Estaba mintiendo para fastidiarme.
—Crees que miento —dijo risueño.
—¿Nunca has ido al colegio? Si eso fuera verdad, y tienes razón, no creo que lo sea, ¿qué hizo que te decidieras a ir este año?

—Tú.

Spoiler

Encontrarlo a él había sido como encontrar a alguien a quien no sabía que andaba buscando. Había aparecido en mi vida demasiado tarde y ahora se estaba marchando demasiado pronto. Lo recordé prometiéndome que renunciaría a todo por mí. Ya lo había hecho. Había renunciado a su propio cuerpo humano para que yo pudiera vivir.

Fin del spoiler

—¿De qué me sirve un cuerpo si no puedo tenerte?