Reseña Despertar, L. J. Smith

Título: Despertar
Título original: The Awakening
Autor: L. J. Smith
Editorial: Destino
ISBN: 9788408078135
Nº páginas: 253 pags
Precio: 14,96€
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Saga Crónicas Vampíricas
1. Despertar
2. Conflicto
3. Furia
4. Invocación

Sinopsis

Stefan Salvatore, el nuevo alumno de Fell’s Church, arrastra con él un misterioso pasado y también a alguien que sólo desea venganza, su hermano Damon: su odio excede las barreras del tiempo… Ahora tratan de reproducir un mortífero triángulo amoroso que tiene en su centro a Elena, la chica más popular del instituto.

Opinión personal

Los spoilers, si los hay, estarán debidamente indicados.

Argumento típico que avanza y profundiza.

Empieza como una historia sencilla. Chicas de instituto y vampiros atormentados.  Un triángulo amoroso que está destinado a acabar en desgracia. Parece que esto ya lo hemos oído antes, ¿no? Bueno, vamos a darle una oportunidad. La protagonista es Elena, la típica chica popular, rubia, de ojos espeluznantemente intensamente azules, perfecta y a la que ningún chico se le resiste. Es vanidosa y quiere ser siempre el centro de atención. Así de primeras, con esta descripición, es difícil empatizar con ella, entender el personaje y quererlo.

Por otro lado tenemos a Stefan. El vampiro torturado por su pasado, solitario, misterioso, italiano y guapísimo. Es amor a primera vista, a pesar de que él se esfuerza por disimularlo, y lo hace muy bien. Esta tensión entre los personajes es divertida, y ver cómo Elena se frustra por no conseguir lo que quiere, también. Lo que empieza como una historia de amor bastante simplona, se empieza a complicar con asesinatos, ataques, desapariciones y sucesos misteriosos. Aquí, en mi opinión, la historia gana bastante. La autora sabe cómo mantener la intriga, dejándome todo el rato con ganas de saber más o de leer más desgracias. Algo muy interesante en este libro es que están sucediendo cosas todo el rato. No te da tiempo a reponerte de una, cuando ya está sucediendo la siguiente.

 Y nos falta el tercer lado de este triángulo amoroso: Damon. Es del que menos habla la autora y es quien más me llama la atención a mí. Cruel, satírico, despiadado y orgulloso. A pesar de estar poco explotado en este libro, se intuye que es un personaje que va a dar mucho juego.

Algo que me gusta mucho es que presenta a los personajes como son, con sus luces y sombras. Elena es la chica perfecta pero es vanidosa y superficial, Stefan es bueno pero lucha continuamente con su lado malo y Damon... es Damon, sin más. Es malvado, sarcástico y seductor, lo sabe y le encanta

Por otro lado, es un libro sencillo, con buen ritmo y fácil de leer. No se hace pesado. Las descripciones son las necesarias. Lleno de acción.

En cuanto a los personajes secundarios, hay que hacer una mención especial a las inseparables amigas de Elena: Bonnie y Meredith. En este primer libro quedan personajes poco desarrollados, un poco planos. Así, Bonnie se presenta como la influenciable y débil, mientras Meredith es la racional y contenida. Algo que no me convence del todo es ese pasado druida de Bonnie, espero que en los próximos libros lo elabore un poco más.

En general me ha gustado bastante porque es una historia trepidante: no paran de pasar cosas y eso compensa un poco la sencillez en la elaboración del carácter de los personajes. Voy a continuar con el siguiente porque me apetece ver cómo sigue la historia. Recomendado si te gustan las historias de vampiros de instituto.

Valoración personal:

 Citas

No importa si no eres capaz de decirlo justo ahora. Yo lo diré por los dos. Y algún día aprenderás a decirlo.

Lo tendría, incluso aunque le fuera la vida en ello. Aunque les fuera la vida a los dos, lo tendría.

Por un momento se preguntó, una vez más, si no debería dejarlo correr. Quizá debería regresar a Italia, de vuelta a su escondite. ¿Qué le hacía pensar que podía reincorporarse al mundo de la luz diurna?
Pero estaba cansado de vivir en sombras. Estaba cansado de la oscuridad y de las cosas que vivían en ella. Sobre todo, estaba cansado de estar solo.

Quiero que me ame tanto como yo le amo.

El mal jamás encontrará la paz. Puede que triunfe, pero jamás encontrará la paz.

—Siempre fuiste un egoísta. Tú único defecto. No estás dispuesto a compartir nada, ¿no es cierto? —De improviso, los labios de Damon se curvaron en una sonrisa excepcionalmente hermosa—. Pero, por suerte, la encantadora Elena es más generosa. ¿No te habló de nuestro pequeño affaire? Vaya, pero si la primera vez que nos vimos casi se me entregó allí mismo.
—¡Eso es una mentira!

—Te estoy advirtiendo, Stefan, no te opongas a mí. No importa para lo que vine aquí. Lo que quiero ahora es a Elena. Y si intentas impedir que la haga mía, te mataré.
—Inténtalo —replicó él.